martes, 7 de octubre de 2008

Saludo cordial para todos,

Queremos decir que si no se ha hecho nada por salvar otras casas patrimoniales de Bogotá es precisamente por el desconocimiento que existe de la manera como se ha venido tratando el tema del Patrimonio Arquitectónico por parte de las autoridades responsables. Nuestra propuesta es precisamente que tengamos en cuenta que permitir la demolición de una casa propicia a la desaparición de todas. Por lo tanto los invitamos a denunciar con hechos, pruebas y fotos, todos aquellos casos en que tengan conocimiento se están sentando precedentes graves para las políticas de conservación de la identidad cultural.

Aclaramos que nosotros no invitamos a nadie a una confrontación callejera. Invitamos sí a todos, a generar un debate sobre un tema que es sensible para la ciudad.

Con respecto a la casa Pérez:

1. Tiene razón Felipe Zuleta cuando dice que la casa sufrió modificaciones, sin embargo existen documentos legales que demuestran que hasta el año 2006 los propietarios seguían solicitando extender su calidad de Bien de Interés Cultural por la correcta preservación de todas sus condiciones originales y la Secretaría Distrital de Planeación por su parte, continuaba otorgándoles estímulos económicos en servicios públicos e impuestos. ¿Se promovió una condición bajo hechos falsos o inconsistentes?, ¿Falló la Secretaría en cada evaluación y en permitir los beneficios económicos que todos subsidiamos?, ¿Las modificaciones se realizaron después de pedir la exclusión de la casa, antes de que la resolución estuviera en pie?

2. Hay un pronunciamiento de la Alcaldía Local de Chapinero, resultado de las presiones de los propios dueños de la edificación, para que se ejerciera una fuerte vigilancia en el tema de la preservación de la calidad cultural de su casa (que de repente afirman ya no tiene) acerca del correcto cumplimiento de las normas encaminadas a la protección de Bienes de Interés Cultural por parte de obras de construcción vecinas a la casa y la firma de un acta de vecindad entre los propietarios de la misma y los responsables de estos proyectos. De esta forma, si los árboles del antejardín se “llenaron de hongos y presentaban una pudrición localizada”, como dice literalmente el concepto técnico de la Secretaría de Ambiente del Distrito en el que se apoyaron para decidir talarlos todos en lugar de tratarlos, debe ser por otra razón.

3. Si creen tan decididamente en los argumentos en contra del valor arquitectónico de la casa (defendido vehementemente en vida por el señor Carlos Pérez Norzagaray) ¿Por qué no permiten que la discusión vuelva al Consejo Asesor de Patrimonio, reconociendo esta vez por supuesto la Constitución Política de Colombia, el Código Contencioso Administrativo y el Decreto 217 de 2004, citando a los todos los interesados al debate?

1 comentario:

Felipe Zuleta dijo...

Me sorprende que el dueño de este blog no ponga la cara. A que le teme?